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19,00 €La Historia nos ayuda a entender el presente, estudiando el pasado. Este libro que ahora os presento trata de Historia, de la historia del lugar donde he nacido, el sitio que me ha visto crecer, en donde he estudiado durante mis primeros anos, donde han vivido mis padres y antepasados desde epocas remotas y donde vivieron otros vecinos que marcaron el devenir de los acontecimientos que aqui ocurrieron y que os relatareen los sucesivos capitulos de este libro. El Alaraz del presente es ante todo el conjunto de huellas que nos hablan de su memorable pasado, de la memoria de sus vecinos en sus nombres y apellidos, del pasado de sus calles, plazas y edificios, del ayer de sus parajes, apenas modificados en su toponimia, que evocan y refieren puntos en el horizonte mas cercano, lugares que fueron y nombran un predio, un molino, una ermita, un prado, una fuente. El presente contiene tesoros ocultos del ayer que es preciso analizar y descubrir a traves de sus testimonios. El presente mira al pasado de forma permanente, viendose reflejado en sus costumbres, en sus refranes y dichos, en nuestras vivencias, en nuestros suenos... Cuando hacemos referencia a un paraje, a la ubicacion de una tierra, a una tradicion, a una costumbre, recordamos el ayer. El pasado no es algo abstracto, se hace real y preciso al hacerlo presente. Los toponimos testimonian lugares y ubicaciones de epocas remotas que no han cambiado a lo largo de los siglos, cuyo nombre fue elegido con un sentido, un testimonio de algo concreto. Asi, en el transcurso de mi investigacion encuentro el nombre de Gaspar de Alaiza. De inmediato vino a mi memoria cuando mi padre me decia, alli, en el prado de Alaiza, nombre que todavia se utiliza y que situa a una de las antiguas fincas de los Valdenebro en Alaraz y que ha quedado para el recuerdo. Cada rincon, cada paraje, cada risco, ya existio en epocas pasadas, sin apenas modificacion en el tiempo.